domingo, 2 de junio de 2013

Dactilar

Tramo de luz, espejo en espirales,
piel adhesiva al sol de una mirada,
viento de norte intenso, llamarada,
risa de sal, remedio de mis males.

Qué dejará este amar de carnavales,
de una escalera a nubes destinada...
Qué habrá de germinar si, huracanada,
la noche siembra gestos inmortales.

No sabremos de aromas condenados,
ni de voces que digan lo vivido
y exploten entre gritos imantados;

mas sabremos del mar, en cuyo nido
los sueños volverán cristalizados
para labios sin tiempo y sin olvido.

2 comentarios:

FerCruzQuintana dijo...

"la noche siembra gestos inmortales" ¡qué hermosa línea!

Me gustó mucho el soneto por que me evocó la idea de noches que se anclan en todos los tiempos de la mente, que sólo pasaron una vez (sólo se "tocaron" una vez) pero han dejado recuerdo infinito.

Alejandra Eme Vázquez dijo...

Muchísimas gracias. Es hermoso saber cuando las palabras llegan transparentes, que por lo menos alguna vez digan justo lo que deseaban decir. Gracias.